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Barras curvas para piercing

Ajuste perfecto con diseño elegante

Qué es una barra curva y por qué elegirla

Una barra curva piercing es una joya con forma arqueada que se utiliza en perforaciones donde una barra recta podría resultar incómoda o ejercer demasiada presión.

Este tipo de joya favorece una mejor cicatrización y se adapta a la anatomía de zonas con curvatura natural, como el ombligo o la ceja.

Su diseño permite lucir decoraciones en ambos extremos —como bolas, cristales o colgantes discretos— manteniendo una estética equilibrada y elegante.

Dónde se usan las barras curvas

Las barras curvadas para piercing se utilizan en diferentes tipos de perforaciones corporales. Entre las más comunes destacan:

– Piercing ombligo: las barras curvas se ajustan a la forma del abdomen, evitando roces o presión.

– Piercing ceja: proporcionan una colocación más cómoda y un estilo moderno.

– Piercing rook o daith: en la oreja, su curvatura se adapta perfectamente a la anatomía del cartílago.

Gracias a su diseño ergonómico, las barras curvas son ideales para quienes buscan comodidad sin renunciar al estilo.

Cuidados esenciales para un piercing con barra curva

Los piercings con barra curva requieren una rutina de limpieza sencilla, pero constante, especialmente durante la fase de cicatrización:

– Limpia la zona dos veces al día con suero fisiológico.

– Evita tocar la joya con las manos sucias.

– No cambies la barra antes del tiempo recomendado por tu perforador.

– Seca bien la zona tras cada limpieza para evitar acumulación de humedad.

Con estos cuidados, tu barra curvada piercing se mantendrá en perfecto estado durante mucho tiempo.

Preguntas frecuentes sobre barras curvas para piercing

La barra curva se adapta mejor a zonas con forma natural o en ángulo, como el ombligo o la ceja, reduciendo la presión y el riesgo de irritación.

Principalmente en el ombligo, la ceja y algunas perforaciones del cartílago como rook o daith.

No siempre. Su uso está pensado para zonas donde una barra recta no encajaría correctamente.

El titanio es la opción más segura por su ligereza, pureza y compatibilidad con la piel.